domingo, 29 de abril de 2012

Aquella tierra.

Miles de rayos gigantescos se levantaban de la tierra mostrando un enorme rostro de la montaña mas grande de todo el continente, se comenzó a levantar con enormes garras rugiendo con animo, su mirada estaba encendida en el fuego infernal de su corazón, la pasión de la lucha corría por sus venas.
Movió su enorme cabeza rociando los bosques con fuego, paró su cuerpo con sus fuertes patas traseras y callo en cuatro, tapo la luz del sol mientras caminaba por el continente destruyendo todo con su fuego, aplastando todo con su cuerpo.
Entonces de las lejanías un barco se alcanzaba a divisar, semi destruido, y raquítico, pero avanzaba con ímpetu hacia las tierras atacadas,  solo un hombre comandaba es barco, el viento soplaba a su favor, y sus espadas descansaban en su espalda listas para la gran batalla. El monstruo alcanzo a verlo desde lo lejos.
Llegaba a la costa, mirando como el monstruo se acercaba a él, le tiraba fuego y rocas, movía la marea por la cual el surcaba, entonces, al llegar casi a la costa, el héroe le clavó un gancho en parte de su cabeza y se impulso para subir a el, desenfundo su cuchillo, de hoja de oro y se lo intento clavar, pero salio volando, esa cosa era impenetrable.
El monstruo movio la cabeza y lo hecho a volar mas de 20 kilometros a la lejanía, el héroe callo y al levantarse izo su espada apuntando a la gran bestia de roca, corrio hacia ella, y ella hacia el, se encontraron, esquivo su gran pata y tomo un soporte para volver a subir, la bestia se movia sin parar.
El héroe callo de nuevo y se volvió a levantar, ahora corría directo a la boca de la bestia, tratando de encontrar la cuerda que le había enganchado. subió por ella, hasta llegar a sus enormes colmillos de los cuales salia lava, tomo su espada, la beso y la avento al estomago del monstruo, la espada se convirtió en un ave de acero la cual voló y le destrozo el corazón a la bestia.
Entonces la gran bestia se desmoronó y el héroe con ella, quedando fundido con la lava, ahora todas las rocas que conformaban su cuerpo habían formado un valle en donde el centro era la espada del héroe clavada en el corazón de la bestia.
Aquel lugar quedo maldito por Perum voraces y mutantes que le atrajeron el colapso y la niebla de Frain.
La legendaria espada de Kwaiserú descansa ahora.

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